MI MIRADA

Después de un día largo, llegó la noche, una espesa negrura que se había cernido sobre la ciudad, pero no era una oscuridad temida sino anhelada, la hora del descanso merecido, el tiempo de disfrutar del mismo tiempo, ver como pasa simplemente no haciendo nada. En una ciudad nueva, desconocida que ir descubriendo poco a poco. Y qué mejor manera que empezar por su centro, por esa placita siempre llena de gentes, de transeuntes de todas las nacionalidades, con la tuna sonando en medio de un círculo de personas, tunos tunantes.

Hace calor, mucho calor, llevo solo una camisita fina con unos pantalones por la rodilla y unas sandalias, que no las del pescador, al menos no las del pescador de almas y trato con una cerveza helada de distraer la calorina. Bonita noche diría yo...

APUNTE

Hoy empiezo a leer ensayo sobre la ceguera de José Saramago, espero que llegue a las espectativas creadas por Raquel. A ver si me engancha pues hace tiempo que no acabo ni un libro de los empezados.

CASANDRA.

Hoy me pregunto por qué ocurren las cosas como ocurren en nuestras vidas, por que cuando nada parece salir y la lucha no da mayores resultados que el no hacer nada, y todo se vuelve en contra y todo es cuesta arriba y da igual la desesperación. Y en cambio de pronto sin casi esfuerzo alguno todo sale a pedir de boca, como escrito o dispuestao de antemano para que cada eslabón ocupe su lugar en cada piñón. Y entonces me doy cuenta lo injusta que es la vida cuando a uno le ocurren herida tras herida mientras ve como otros son como empujados por una puta mano invisible se encuentran en el momento y lugar adecuados para que todo les fluya sin mayores esfuerzos. Pero por supuesto no me voy a quejar de tener esa mano empujándome del culo.

Y es que sentirse como Casandra, baticinando desgracias, sabiendo de antemano lo que puede llegar a ocurrir es sin duda una desgracia en sí misma. No me extraña que nadie la escuchara, o como algún otro erudito dice:

Aunque Casandra previó la destrucción de Troya, la muerte de Agamenón y su propia desgracia, fue incapaz de evitar estas tragedias, tal era la maldición de Apolo. Su familia creía que estaba loca y, en algunas versiones, la mantuvieron encerrada en casa o encarcelada, lo que la hace enloquecer. En otras versiones, simplemente era una incomprendida.

¿era una loca o la imposiblididad de actuar la volvió loca??? quien sabe.

De ahi el término moderno de sindrome de Casandra, Una persona con el sindrome de casandra siempre estará vaticinando desgracias. Es probable que en algunos casos estas desgracias lleguen a suceder, causadas por la propia actitud negativa del sujeto, fenómeno denominado "profecía autocumplida".

Pero a pesar que una serie de cosas si son producidas por uno mismo por su negativismo o positivismo, otras muchas, demasiadas vienen producidas por eso que llamamos suerte, providencia, destino, quien sabe o quizás en cada vida ocurren cosas buenas y cosas malas en igual medida, vaaaaaaa, que no, se me escapa de donde o quien reparte la suerte.

CON CARIÑO

Ayer hablé con Katy, una "vieja amiga-amante", hacía ya tanto tiempo que no nos comunicábamos, y al mismo tiempo la sensación era como que no había pasado más de un día sin hablar, todo tan natural como siempre, sin tensiones, sí que tengo que reconocer que en ella notaba un ligero miedo, miedo a los sentimientos perdidos. Me alegró saber que seguía trabajando en la televisión, que al menos en lo laboral todo andaba más encarrilado en su vida, quizás todavía no haya superado todos sus miedos, eso es tan difícil de hacer que supongo que o borramos la memoria, y por ahora es algo imposible, o los fantasmas de los que siempre me hablaba mi chiquita tortura, son inevitables en nuestro viaje por este mundo. Son parte de nosotros mismos los queramos y odiemos. Yo tengo mi cupo también de fantasmas, y necesito aprender a vivir con ellos, llegan por mil caminos y arraigan en nuestros campos bien abonados de dolor y heridas abiertas. Hay quien piensa que endureciéndose puede matarlos, pero no, se aletargan mientras nos jodemos para destruirlos, pero a la mínima vuelven a florecer.

Recuerdo en este momento la película de ese matemático esquizofrénico, ahí está en parte la clave, no querer eliminarlos pues es tarea imposible, sino saber vivir compartiendo con esas figuras oscuras la parte de vida que nos queda.

Hablando y hablando con ella compredió el motivo de lo que ocurrió, de por qué no pude seguir a su lado, de por qué a pesar del dolor causado era necesaria mi partida.

Me encantó hablar con ella así, con esa dulzura que ella siempre supo darme y que aun así no pude seguir aceptando.

ENREVESADOS PENSAMIENTOS DE UNA MENTE LOCA

Citaré a algún pensador ya antiguo quizás por muchos mentado y por nadie conocido, con una sabiduría que va más allá de la humana, digo yo ehhh.
El verbo se hizo carne. Osea la palabra, la palabra es el mundo interiorizado como tu sabes de sobra, el significante de lo tangible en una mente intangible, que no cerebro. Su fuerza va mucho más allá de los simples sonidos encadenados. Es algo que los embaucadores, gurús y ascetas saben de sobra, como tu conoces nacemos con una gramatica universal programada, es algo evolutivo, algo que se desarrolla de forma natural si todo está bien en nuestros cerebros, es lo que nos separa del animal que fuimos y cuanto más lejos nos encontramos de satisfacer las necesidades básicas más nos acercamos a lo conceptual, al significante. Como un viaje que parte de lo conceptual, pasando por el animal y volviendo hacia el origen intelectual.
Pero esa parte humana que nos iguala tanto es la que no nos gusta, y buscamos la diferenciación, escapar del anonimato en el que se siente que no se existe, la necesidad de parecer sin ser, o más bien ser a través del parecer. Pero da igual, en ese viaje de los que llegaron a la cima de ser por el parecer, por la diferenciación del resto en su afamado paseo triunfal por la fama, son tan iguales al resto fuera de esa mirada que parece resaltarlos que en la forma y en el fondo lo único que los dirime es de nuevo su mundo interior, su significante, pues cuando han asentado su vida, ideas, vivencias en esa parte que los hace diferentes es como asentar un palacio sobre fango, más pronto que tarde se derrumba, aquí me refiero a los múltiples problemas a los que se enfrentan todos esos famosos y que enriqueces a psiquiatras, psicólogos y enterradores. Lástima no haber nacido en estados unidos, jeje. Vamos que lo que somos está en lo que significamos para nosotros mismos, donde radica nuestro mundo y nuestra diferencia está en lo que cada uno vive ya sea igual al resto de millones de seres humanos, pues lo que sin duda no puede hacerse todavía, es compartir vivencias ni recuerdos, cada cual vive su diferencia sin posibilidad de cambiar eso.
Bueno sólo es una opinión, una simple opinión.

SOÑANDO CON UN SUEÑO

Ayer te soñé, fue tan real que me ha impresionado, y más con todo lo que ha ocurrido entre nosotros. Allí estábamos los dos, solos en la que fue mi habitación cuando vivía en casa de mis padres, en la cama que yo ocupé, y eso es lo raro, ya llevo unos cuantos años fuera de esa casa y aun ahí sigue prendida en mis recuerdos y eso que en el fondo no es la mejor parte de mi vida, sino la peor, la de más angustias, también la de más sueños por cumplir y que nunca llegaban. Nunca pienso para bien en esa casa ni en esa habitación, pero es la que contiene más cosas de mi, en parte yo soy como esa habitación, espartana, pequeña, llena de cosas hechas por mi. Allí poco a poco me fui forjando a contra corriente de lo que todas opinaban de mi.
Allí estabas, casi encima de mi, tan erótica, tan sensual como una gatita en celo. Empezamos a besarnos, con delicadeza, con ansia contenida, pero se notaba tu deseo, mi deseo. Y ahí estaban tus labios húmedos recorriendo los míos, tu lengua suave, tu cuerpo anhelando el mío, y todo tan vívido, fue un rato de autenticidad, todas esas sensaciones compactadas en el ensueño. La verdad me ha impresionado mucho eso, hacía tiempo que mi alma no estaba tan relajada como para soñar y soñar así contigo a pesar de la batalla perdida ha sido un gran regalo, algo que me ha emocionado. Como quisiera repetirlo.

DE CAMINOS

"Insondables son los caminos del señor", así reza una frase demasiado masticada, porque lo que son insondables son los caminos de las personas, como se endurece el suelo cuando más doloridos tenemos los pies, y hasta la arena más fina y suave llega a cansar al recorrer una larga distancia.

¿Si la odio?, no, no, no. NO, duele pero no la odio, somos barquitos zarandeados en aguas tumultuosas que nos llevan y traen, las que permiten aproximaciones y las que impiden cualquier acto de entendimiento. Y mi barquito ya ha sido sacudido en tantas ocasiones que la tablazón está demasiado suelta como para que soporte un embite más. Lo se, lo siento profundamente en mi ser, no soportaría enloquecer de nuevo, no soportaría de nuevo enloquecer por ella y sentir tal frialdad, ser la diana de su rencor. Porque si en algo soy débil es en lo que siento por ella.

"tengo miedo de perder la cabeza otra vez, Si por ti ya la perdí"...

UNAS TETAS QUE ME HICIERON MIRAR SUS OJOS

Unas cuantas copas y en ese estado de media flotación mezclado con un puntito de felicidad entramos en el que iba a ser el último bar de la noche. LLeno es decir poco, todo eran roces y pequeños empujones para ir avanzando en ese útero de calor y sudor y risas y alcohol. La música bien alta para hacerte sentir en un mundo aparte del mundo ese ordinario en el que las cosas son tan iguales de un día para otro. La camisa ya se me pegaba un poco al cuerpo del sudor, hacía calor, por eso me solté un par de botones, no para provocar a alguna corderita o lobita de las que por allí abundaban, tan sólo para sobre llevar mejor el calor humano allí concentrado.
Por fin llegamos a nuestro lugar favorito del bar, y como no, a la barra a pedir, mis amigos por un lado, yo por otro pues la rusita de pechos grandes y culito prieto que estaba de camarera me ponía un poco berraco, tanto como a todos los alli aglomerados claro. Pero me gustaba que me mirara a los ojos y los labios al menos para entenderme lo que la pedía para beber. Pronto pasaba y se volvía a mirar a los ojos y los labios de cualquier otro, una vulgar mariposa traicionera más.
Muchas caras ya conocidas, mucha ropa sexy y culos apretados como reclamo de ofertas sexuales que en realidad buscan relaciones estables en la mayoría de casos, que se ofertan mostrando o mejor dicho ocultando su natural ser que fue transformado horas antes a golpe de maquillajes, collares y ropitas que acentúan partes y esconden faltas. Pero a mi nunca me llamó la atención quien necesita el disfraz para engañar. Soy más bruto, más de detalles, soy más de impulsos que se mueven a la velocidad de la luz de una mirada a otra. De tetas pequeñas o grandes pero con un algo que no se puede explicar, soy más de un rasgo que me inunde, de unos labios carnosos que no tengan colágeno, de unos muslos con la forma golosa de que quieres ser agarrados por mis manos. Y en estas que de un río de personas surge quien a partir de ese momento te reclama toda la atención. La piel morena, y ojos grandes pero rasgados, poco maquillaje o al menos con aspecto natural, el pelo simplemente recogido, nada estudiado, solo una mujer que irradiaba sensualidad, eso era todo, belleza de formas puras, y con esos ya mis ojos no pudieron despegarse de ella. Todo mi gozo en un pozo, estaba acompañada, por un soplapollas, bueno eso pensé y daba igual quien fuera, pero para mi lo era por estar con ella, aunque en realidad luego me di cuenta que no estaban solos, que estaban como en un grupito, aunque en realidad él fuera su acompañante la miraba como si estuviera sola.
Que pechos dios santo, tan morenitos y suaves a la vista, rebosantes de vida, estaba acelerando sabiendo que tendría que frenar de golpe, pero no, las cosas a veces salen tan bien que dan miedo y resulta que en un mar de dificultades llegamos a buen puerto.
De tanto beber me dieron ganas de mear, así que directo al baño, pero lástima, acupado, tocaba esperar, y de esta que también el servicio de chicas estaba ocupado y llegó mi sirena, tocaba esperar, y como podeís imaginar no pude refrenar mi lengua ni mi habitual timidez, ni recuerdo lo que la dije, pero fue la chispa que necesitaba esa mecha para empezar a arder, y ¿como os cuento el resto?, eso ya mañana si me tiraís un poco de la lengua os diré con pelos y señales todo lo que en la áfrica salvaje ocurrió...

PRIMER HECHO

Recuerdo momentos ya inalcanzables, en tiempo como en cordura, en que sosegadamente miraba al horizonte, sin ningún miedo a que la luz del sol fuera desapareciendo mientras incendiaba el cielo en un rojo cautivador.