sábado, 22 de septiembre de 2007

MI MIRADA


Después de un día largo, llegó la noche, una espesa negrura que se había cernido sobre la ciudad, pero no era una oscuridad temida sino anhelada, la hora del descanso merecido, el tiempo de disfrutar del mismo tiempo, ver como pasa simplemente no haciendo nada. En una ciudad nueva, desconocida que ir descubriendo poco a poco. Y qué mejor manera que empezar por su centro, por esa placita siempre llena de gentes, de transeuntes de todas las nacionalidades, con la tuna sonando en medio de un círculo de personas, tunos tunantes.

Hace calor, mucho calor, llevo solo una camisita fina con unos pantalones por la rodilla y unas sandalias, que no las del pescador, al menos no las del pescador de almas y trato con una cerveza helada de distraer la calorina. Bonita noche diría yo...

9 comentarios:

Costennita dijo...

Antoja sentarse en esas sillas y observar, me pediría un refresco mientras me acostumbro al dictamen de mi religión (no beber alcohol)

EL LOCO dijo...

Religión, cual religión???????...

Costennita dijo...

En este poco tiempo he cambiado mucho algunas cosas y me siento bien conmigo misma

Anónimo dijo...

COMOOOOO!!, pero de cual religión hablas?. A mi nunca me gustaron los borricos que caminan por donde les dicen con los ojos tapados, la mente humana es tan frágil que parece la de un niño que sueña con volar...

Costennita dijo...

cálmate!!! ya te escribo al mail y te explico... y no soy borrico! siempre me has conocido y sabes que creo en Dios y tengo temor de él

Anónimo dijo...

No es un como de intranquilo, a mi all� cada uno, solo es de sorpresa.

Costennita dijo...

Te he dicho alguna vez que me gusta cómo escribes? pero no hablo de tus novelas ahora, hablo de este espacio

Anónimo dijo...

Alguna vez lo mencionaste, quiz�s ahora que se remanse el esp�ritu pueda llevarse a buen t�rmino esa historia no terminada de A y T.

Anónimo dijo...

Pues que se remanse pronto, me gustaría leer esa historia completa